Con esta sensibilidad, bien arraigada en nuestro proyecto educativo – pastoral, acabamos de acoger con alegría y satisfacción el testimonio en “vivo y en directo” de Uba (Ubaldino). Se trata de un salesiano venezolano, misionero en África. Ubaldino Andrade, junto con otros cinco hermanos de la pequeña comunidad instalada en el asentamiento de refugiados de Palabek, son aguerridos “luchadores” a favor del “Reino de Dios”, con las armas salesianas de la “Caridad Pastoral” que se despliega en el terreno de la educación.?
En Sierra Leona, Uba trabajó durante más de 20 años. Allí no faltaron sucesivamente proyectos de choque, conocidos a través de misiones salesianas tales como el trabajo en la reinserción de los “niños soldado” o, tras la epidemia del ébola que asoló el país, el trabajo de “reconstrucción humana”, con “los huérfanos del Ébola” sin hogar y sin techo, perseguidos a muerte por los prejuicios culturales y sociales y llamados a ser la escoria de la sociedad.
Uba se encuentra ahora en el “asentamiento de refugiados” de Palabek en Uganda, a 30 km de la frontera con Sudán del Sur. Este es el último asentamiento creado por Uganda en 2017, diseñado para coger 150000 personas; actualmente está a punto de rebasar los 50000 refugiados.?
Aunque la paz se firmó ya hace más de un año, la hambruna, consecuencia de la guerra y la persecución de los más indefensos, como si ellos fueran los culpables de tanta desgracia, mantiene un flujo diario constante hacia el asentamiento de Palabek. Un porcentaje alto son católicos, discriminados y perseguidos pero que mantienen la fe viva, la esperanza y las ganas de vivir, a pesar de todo.?
Los salesianos, con el Rector Mayor Don Ángel Fernández Artime a la cabeza, están respondiendo con creatividad y entrega incondicional a la llamada de la “Divina Providencia” en favor de estas gentes de quién “nadie se acuerda”.?
Y es que los medios de comunicación de nuestra sociedad están “a sus líos mediáticos”, quizás a la búsqueda de tajadas de carácter económico, ideológico y político. La gente que no “renta” en este sentido, “no merece la pena” y trae complicaciones. Uganda ha dado un ejemplo de “humanidad” a los países desarrollados acogiendo en asentamientos a más de un millón de personas huidas de la guerra civil de Sudan del Sur, simplemente porque son personas que necesitan ayuda.?
Misiones Salesianas a través de la procura salesiana de España, se ha hecho portavoz de los que no tienen palabra en esta sociedad, a través de este documental rodado en Palabek por el prestigioso director de cine, Raúl de la Fuente, con 2 “Goya” y finalista en los “Óscar” hace 3 años.?
Misiones Salesianas se ha traído al padre Ubaldino que, al mismo tiempo que hace rehabilitación para tratar una hernia discal, ha dado testimonio recorriendo toda España y presentando la respuesta que la Divina Providencia hace a través de los misioneros y de tantas personas que les respaldan, en este caso en Palabek. Además de cuatro escuelas para más de 700 niños y adolescentes, los salesianos han montado allí una escuela profesional para jóvenes y adultos. La gente, con ganas de vivir y con esperanza, y muy solidaria – en su Indigencia, ha costeado la capilla para la liturgia (en especie: dos adobes, un ladrillo… y naturalmente la mano de obra…)?.
Más de 20000 jóvenes de los colegios Salesianos de toda España se han beneficiado del testimonio de Uba. En Ciudad de los muchachos, lo han recibido los alumnos de ESO y FP en dos sesiones distintas de hora y media. “Palabek. Refugio de esperanza” presenta la situación del asentamiento a través de la historia de dos jóvenes Alice y Gladys, ambas madres de 21 (viuda) y 24 años con un hijo de 2 años que dejó en Sudán del Sur con su madre, quien va a visitarlo con frecuencia en una moto. Después de ver el vídeo de unos 25 minutos, salía el padre Uba desde atrás para hablar a los alumnos y alguno exclamaba “- Mira, si es el de la película”.?
Agradecemos a Uba, a los miembros de su comunidad de Palabek, junto con Raúl de la Fuente, Alberto López (Dpto. de Comunicación de Misiones Salesianas) y Cristina Bermejo (JyD) y a Misiones Salesianas el que nos muevan y nos conmuevan. Son luchas que merecen pena ser apoyadas con decisión, más allá de las ideologías que intentan abrirse camino olvidando la dignidad de la persona humana, ignorándola o pasando por encima de ella.
