Salesianos

Salesianos de Don Bosco (SDB)

¿Quiénes somos los Salesianos?

Los Salesianos de Don Bosco (SDB) somos una congregación religiosa perteneciente a la Iglesia Católica y fundada por San Juan Bosco el 18 de diciembre de 1859, en Turín. Nuestro nombre oficial es “Sociedad de San Francisco de Sales”, en referencia al santo que nuestro fundador eligió como modelo por su amabilidad y fuerza evangelizadora. Comúnmente se nos conoce por “Salesianos de Don Bosco” o simplemente “Salesianos”. 

Nuestra Congregación está formada por salesianos sacerdotes y salesianos laicos o coadjutores. Nuestro proyecto apostólico, heredado de Don Bosco, se basa en ser signos y portadores del amor de Dios a los jóvenes, especialmente a los más pobres.

Los jóvenes representan el primer y más privilegiado horizonte de nuestro trabajo apostólico. Las actividades que los Salesianos llevamos adelante en el mundo están organizadas en tres sectores: la educación, las misiones y la comunicación social

Nuestra identidad

Los Salesianos somos una congregación de religiosos pertenecientes a la Iglesia Católica, fundados por San Juan Bosco. Nuestro nombre oficial es Sociedad de San Francisco de Sales, pues Don Bosco, así nos referimos familiarmente a nuestro Fundador, eligió a este santo como modelo por su amabilidad y pasión evangelizadora. Comúnmente se nos conoce por Salesianos de Don Bosco (SDB) o simplemente Salesianos. Nuestra Congregación está formada por salesianos sacerdotes y salesianos laicos.

El artículo 2 de nuestras Constituciones dice:

Los salesianos de Don Bosco (SDB) formamos una comunidad de bautizados que, dóciles a la voz del Espíritu, nos proponemos realizar, en una forma específica de vida religiosa, el proyecto apostólico del Fundador: Ser en la Iglesia signos y portadores del amor de Dios a los jóvenes, especialmente a los más pobres. En el cumplimiento de esta misión encontramos el camino de nuestra santificación

¿Cuál es nuestra misión?

Nuestra misión, dentro de la Iglesia, es la educación y la evangelización de los jóvenes. El proyecto educativo-pastoral que queremos llevar adelante en todas nuestras obras está orientado a la promoción integral de la persona del joven y sus raíces están inspiradas en el humanismo cristiano.

Nuestras Constituciones lo expresan así:

Fieles a los compromisos heredados de Don Bosco, somos evangelizadores de los jóvenes; tenemos cuidado especial de las vocaciones apostólicas; somos educadores de la fe en ambientes populares, sobre todo con la comunicación social, y anunciamos el Evangelio a los pueblos que no creen” (Art. 6).

Extendidos por todo el mundo, trabajamos en 134 países, ejercemos nuestra acción en centros juveniles, colegios, escuelas de formación profesional, parroquias, centros de asistencia a jóvenes en riesgo y exclusión social, escuelas de formación del profesorado, universidades, residencias, misiones, centros de comunicación social y otras presencias al servicio de la juventud.

Los Salesianos de Don Bosco somos unos 14.500 repartidos por los cinco continentes y distribuidos en 90 Inspectorías, también llamadas provincias religiosas.

De ellos, la obra de Don Bosco en España cuenta con unos 1.000 salesianos, sacerdotes y salesianos laicos, distribuidos en dos Inspectorías o Provincias Religiosas: María Auxiliadora con sede en Sevilla y Santiago el Mayor con sede en Madrid. Vivimos en comunidades, 155 en España, desde las que nos dedicamos a la educación y evangelización de los jóvenes, preferentemente de las clases populares.

La Espiritualidad Salesiana

Cuando decimos “Espiritualidad Salesiana” nos referimos a los rasgos espirituales propios de todas aquellas personas que, dentro de un grupo reconocido en la Familia Salesiana, comparten un verdadero parentesco espiritual y apostólico como herederos y portadores del espíritu y la misión que el Espíritu Santo confió a Don Bosco para la vida de la Iglesia.

¿Cuáles son los rasgos propios de nuestra espiritualidad?

  • La caridad pastoral sin límites.
  • La gracia de unidad que busca el equilibrio de vida.
  • El estilo de oración festivo y sencillo.
  • La misión juvenil y popular abierta a todos
  • El optimismo y el gozo de la esperanza.
  • La ascesis de la bondad y la amabilidad que crea familia
  • El Trabajo y la Templanza.
  • El espíritu de iniciativa.
  • El arraigo en el misterio de Cristo y la vida en manos de María.
  • El sentido de Iglesia.