Comenzó haciendo su presentación personal y explicando a los alumnos la razón de su visita. Transmitió saludos en nombre del  Rector Mayor. Habló de las presencias salesianas en el mundo, destacando  entre esas presencias , el gran número de Escuelas Profesionales para hacerles ver la importancia que Don Bosco dio a la enseñanza profesional y cómo se cuidó de estos alumnos.

En segundo lugar les felicitó por el buen ambiente creado en el colegio. Les  dijo que Don Bosco desde un principio más que de colegio hablaba de “casa”, para hacerles  notar la importancia de los valores de la cercanía, de la familiaridad, de las buenas relaciones entre todos los componentes de la comunidad, de la casa. Don Bosco quería que sus muchachos se sintiesen bien, a gusto, como en su propia casa.

Seguidamente les habló de la importancia de su formación. De la necesidad de ser, antes que profesionales, personas educadas, formadas, íntegras y después profesionales  y siempre aspirando a alcanzar  en las dos dimensiones la excelencia y no conformarse con menos.

Y Por último de la necesidad de cuidar de la familia, de cuidar a las familias, de  la necesidad de integrarlas en la tarea colegial de la educación,  de la formación.  Para  que pudieran sentirse implicados y corresponsables tanto en la etapa colegial como  en la relación con las empresas  acogedoras de sus propios hijos.

Se despidió con el tradicional saludo del “Chao, chao”…

En los dos días que ha durado la visita, Martoglio, además, se ha entrevistado con los salesianos y se ha reunido con el claustro de profesores.