Esta vez, el foco se ha puesto en el aspecto psicológico y afectivo. Temática amplia y con muchas cuestiones abiertas, que tanto Aurora, Miguel Angel y Alberto (los docentes) se han encargado de proponer el marco de actuación y han proporcionado herramientas prácticas.
A medida que avanza la formación, los participantes descubren la amplitud y responsabilidad que entraña acompañar personalmente a las personas en su maduración humana y cristiana.
El curso se concluirá con un último fin de semana en el mes de abril.