Allí le estábamos esperando para darle la mejor de las bienvenidas los cuatro miembros de la Comunidad, Juan José Castro, director y párroco de San Martín, Alfonso Valcárcel, párroco de Nª Sª del Carmen, Marcos Gaisán, ecónomo, y Eustaquio Sánchez, vicario parroquial.

El Domingo, día 23, participó, presidiendo, en la Eucaristía de las Familias (a las 11 h.) en la parroquia de san Martín del Pino y, a continuación, en la Eucaristía también de la parroquia de Nª Sª del Carmen. Tanto en una como en otra parroquia, celebrábamos la Jornada del Domund, con el gesto del envío de los catequistas y animadores. Las eucaristías estuvieron muy concurridas por las familias con los padres, chicos, jóvenes, animadores, catequistas, etc. Fue un ambiente muy festivo con una creativa participación y diversos gestos.

A continuación con los cuatro miembros de la pequeña comunidad, gozó de un agradable paseo y comida por los bellos parajes de Suances, junto al mar cantábrico.

El día 24, lunes, conmemoración de María Auxiliadora. Un día muy significativo para los diversos miembros de la Familia Salesiana. Así lo hicimos también en nuestros ambientes. Por la mañana, el Inspector habló con cada uno de los hermanos de la comunidad.

Por la tarde, se reunió en Nª Sª del Carmen con los socios de ADMA, departiendo con ellos sobre sus inquietudes como buenos devotos de la Auxiliadora. Asimismo, celebró la eucaristía en la parroquia de San Martín con un nutrido grupo de personas, especialmente devotos de la Virgen de Don Bosco. Y, a continuación, a modo de “buenas noches” tuvo un encuentro con algunos miembros de la comunidad parroquial (animadores de jóvenes, representantes de cáritas, visita y atención a enfermos, etc.).

Con la comunidad siguió manteniendo una convivencia fraterna. En esos momentos se le fueron presentando las diversas actividades pastorales que los salesianos animan en esta Obra formada por las dos parroquias en un barrio “periférico” de Santander. Una de ella, Nª Sª del Carmen, surgió a raíz de la presencia de los salesianos en el Colegio de Nueva Montaña, promocionado por la Empresa Nueva Montaña Quijano, S.A. Anteriormente (desde 1962 como iglesia con servicios religiosos para el barrio y desde 1976 constituida como parroquia de la diócesis, animada por los salesianos. Y en 2005, se derriba dicha parroquia, según el nuevo plan de urbanismo, continuando los servicios religiosos parroquiales en unos bajos del barrio. En 2011 –el 4 de junio- se inaugura el nuevo templo circular en la mitad del barrio de Nueva Montaña).

A la vez, se les confía los salesianos la atención de la parroquia de San Martín, sita en una nave del barrio vecino de Primero de mayo (Peñacastillo). Con ella también se atiende a una pequeña ermita de Santa Lucía en el mismo barrio.

En ambas parroquias hay diversas actividades pastorales, destacando, sobre todo, la dimensión juvenil, así como la social (Cártitas), catequética (proceso que comienza en la catequesis de iniciación cristiana y culmina en el sacramento de la confirmación de los jóvenes), familiar, cultual y evangelizadora, etc.. Dentro de las limitaciones estructurales (sobre todo la parroquia de san Martin, que sólo dispone de un pequeño templo y unas mínimas salitas), se trabaja con entusiasmo por llevar a cabo una labor evangelizadora de “Iglesia en salida (como indica el papa Francisco) y “en las periferias” de esta bella ciudad de Santander. 

El día 25, martes, una vez leído el acta de la visita, don Juan Carlos se despedía y nos dejaba, marchando a la presencia de Mohernando (Guadalajara), donde tendría otros encuentros con los salesianos, sacerdotes del arciprestazgo y el Sr. Obispo.

En estas dos jornadas, el Sr. Inspector ha tenido la oportunidad de conocer la riqueza de nuestras actividades sencillas y evangélicas en estos dos barrios de Nueva Montaña y Primero de Mayo (Peñacastillo, Santander).