Las Jornadas Vocacionales “Un día con Don Bosco” continúan con el ritmo de propuestas que se están trabajando desde el Equipo Inspectorial de Animación Vocacional. Estas experiencias quieren ser una respuesta concreta para los adolescentes y jóvenes de nuestras Casas (desde los 14 a los 18 años) que han manifestado cierta inquietud por la vida salesiana y los Salesianos de Don Bosco.
Diez fueron los adolescentes y jóvenes que se dieron cita en Carabanchel para disfrutar y vivir en profundidad esta experiencia vocacional salesiana. Los muchachos, desde los 16 a los 19 años, procedían de las Casas de Arévalo (1), Atocha (2), Carabanchel (2), Estrecho (2), Paseo (2) y Soto del Real (1). Junto con ellos se hicieron presentes sus respectivos acompañantes, Salesianos de Don Bosco y Salesianos Cooperadores, que coordinan la acción pastoral a nivel local.
La mañana discurrió en tres grandes momentos: el tema formativo en torno a la vocación de Don Bosco, en el aula de Salesianidad, los testimonios vocacionales de varios Salesianos coadjutores y sacerdotes, en la visita de los espacios de la Comunidad, y los momentos de reflexión, comunicación y diálogo entre los mismos participantes.
Además de estos muchachos, también estuvieron presentes en la Comunidad Propuesta, siguiendo su ritmo propio, los jóvenes que mensualmente se reúnen en torno al Grupo Búsqueda 360º.
Al final de la mañana, unidos ya los dos grupos de muchachos, tuvo lugar la celebración de la Eucaristía, que presidió Xabier Camino, Coordinador inspectorial de Animación Vocacional y responsable del encuentro, quien animó a los presentes a “abrir el corazón para buscar, de corazón, el sueño que Dios tiene para cada uno de nosotros”, porque “en la fe, como en la vida, la felicidad está en el corazón que Dios ha modelado en nuestro interior y que quiere que compartamos con los que más nos necesitan”.
El almuerzo en la Comunidad Propuesta “Sagrado Corazón”, junto a una animada sobremesa, pusieron el punto final a la jornada. Un día que congregó a más de 25 jóvenes que, en el Bicentenario del nacimiento de Don Bosco, siguen dejándose interrogar por su vida, su entrega y su compromiso. Más de 25 jóvenes que, en plena Octava Pascual, quieren escuchar la voz del Resucitado que sigue susurrando a cada uno: ¡Cuento contigo!
