Más de 3.000 personas han podido seguir la vida de Don Bosco a través de unas estupendas canciones con mensajes llenos de esperanza y de compromiso por los jóvenes con referencias continuas al puesto que ocupaba María Auxiliadora en su vida y con una invitación a “estar siempre alegres” y darse cuenta de que “la educación es cosa del corazón”. El equipo de técnicos de luz y sonido, el grupo de padres y madres dedicados a tener a punto todos los detalles de vestuario y escenario, los adultos que han entregado su tiempo para dirigir el musical y acompañar la experiencia de los más jóvenes, todos han contribuido a que el musical llegara al corazón de los espectadores. Así lo hizo ver el arzobispo Francisco en sus palabras de despedida al concluir la última representación. Sus palabras animaron a jóvenes y mayores a seguir “soñando” y mirando adelante en la vida como Don Bosco.
Una agradable experiencia la que ha dejado el musical Don Bosco en este año del bicentenario de su nacimiento.
En la fotografía: El Arzobispo de Pamplona y Tudela, Francisco Pérez, Iñaki Lete y Josean Hernández, con los jóvenes que participaron en la última representación del musical Don Bosco. Fotografía de Gerardo Iriarte.
