El 24 de enero, con motivo del Bicentenario del nacimiento de Don Bosco las familias salesianas de Logroño se acercaron a Salesianos “Los Boscos”, para agradecer a Dios, el espíritu y el carisma que Don Bosco contagió a sus muchachos, a sus primeros salesianos y a la personas que colaboraban con él.?

Hoy este carisma sigue presente en nuestras comunidades educativas de Salesianos “Domingo Savio” y de Salesianos “Los Boscos”.?Se escogió esta fecha por ser 24, conmemoración de María Auxiliadora y por ser San Francisco de Sales. Don Bosco siempre admiró al santo obispo de Ginebra hasta el punto de elegirlo como modelo y protector para su congregación. De él proviene el cartelito que Don Bosco tenía en su habitación: “Da mihi animas, coetera tolle” (“Dame almas, llévate lo demás”)

?El acto consistió en una eucaristía de agradecimiento y renovación de nuestro carisma y misión compartida. Al final se pasó a besar la medalla de María Auxiliadora pidiendo su bendición y protección para ésta, su familia.