Este año “tocaba” juntarse en los Salesianos. Y, la casa de Madrid-Paseo Extremadura, ha sido la encargada de hacer los honores. Muy bien por cierto.
A partir de las cuatro y media de la tarde, ya estaban abiertas las puertas de la parroquia San Juan Bosco y un buen grupo de personas acogiendo a los que iban llegando y poniéndoles una pegatina como distintivo, en que figuraba el nombre de cada uno y el grupo de pertenencia.
A las cinco de la tarde, para no interrumpir la vida parroquial (había después un bautismo), comenzó la eucaristía. La iglesia prácticamente llena. Un nutrido grupo de sacerdotes, comenzando por los de la propia comunidad que acogía el encuentro. La eucaristía fue presidida por el Vicario inspectorial, Samuel Segura, acompañado en la presidencia por el director de la comunidad (Jesús Lozano) y por el Delegado inspectorial para la Familia Salesiana (José Antonio Hernández). El tema que proponía la Palabra de Dios era muy oportuno para este momento de convivencia: la alegría de la espera del Señor y su implicación en nuestras vidas y en la de cada uno de nuestros grupos. Añadir que los músicos nos ayudaron a vivir este momento con una alegría especial.
En la acción de gracias se entregó un detalle como recuerdo de este día. Por la parte de atrás tenía la oración propuesta para el Bicentenario de Don Bosco. La rezamos todos juntos.
Luego fuimos todos al teatro. Agradecer lo bien que estaba organizado todo, desde el buen hacer de la presentadora, hasta el ritmo oportuno del desarrollo.
Comenzamos con un saludo a modo de postal navideña del Sr. Inspector, que, como no pudo hacerse presente, lo leyó su Vicario. Siguió una ágil presentación del Aguinaldo, al estilo de Don Bosco, con preguntas-respuestas entre la presentadora y José Luis, Paloma y Rafael, un SDB, una FMA, un cooperador. Luego, por orden de lista, fueron saliendo los representantes de cada uno de los nueve grupos presentes. En tres minutos (más o menos) consiguieron decirnos la identidad y algunas novedades del último año de sus respectivos grupos. Destacar las aportaciones de Maruja y Samuel, sobre detalles de los últimos capítulos generales. Como guinda al buen rato pasado en el teatro, el grupo local, escénico y musical, Amorevo nos entusiasmó con una selección de cuatro joyitas de los musicales que han ido realizando en los 25 años de su existencia. Muchas gracias a esos jóvenes y gente más menuda por su disponibilidad.
Acabamos, esta tarde de convivencia, compartiendo una merienda-cena en la galería del colegio. Soy testigo que todos comieron bien y que todavía sobró. Y eso que no faltaría mucho para llegar a las trescientas personas. La lluvia no pudo con ellas.
Gracias a toda la Familia Salesiana de Madrid. Ahora, con el mensaje de la eucaristía, a seguir trabajando “estando alegres en el Señor”.
La noticia se completa a través de galería fotográfica.
