Segunda Jornada del Congreso Histórico Internacional

21 noviembre 2014

 

Nos habían dicho que uno hiciera la meditación y rezase laudes por "por su cuenta" y a las 6:30 de la mañana la iglesia ya estaba casi llena.

La misa de "Don Bosco" la presidió el Rector Mayor rodeado de todos los que quisimos concelebrar.

La sesión de la mañana se reserva para las conferencias de más peso específico.

Don Motto y sor María Teresa Spiga nos hicieron un resumen numérico de los SDB y de las FMA. Muchas tablas con los números del pasado y las actuales. Y, sobre todo, viendo la riqueza de todos los ambientes donde se trabaja.

Después el profesor Mario Belardinelli hizo un rápido recorrido sobre la situaciones diversas han ido influyendo en los jóvenes durante el tiempo de Don Bosco y el nuestro.

Tras el descanso, sor Grazia Loparco y don Bruno Bordignon afrontaron la respuesta salesiana a los procesos que vivió la sociedad cambiante desde la muerte de Don Bosco hasta después de la segunda guerra mundial.

Por la tarde, había trece "relaciones" sobre temas ligados con la geografía salesiana. Cada una duraba 45 minutos y podías hacer las cuatro que más te gustaran.

Yo me apunté a unas de: Italia, España, África y las "vidas de Don Bosco" publicadas antes de 1888. Gustó mucho la de España, sobre la inculturación del carisma salesiano por don Rinaldi
(Presentado por Mari Fe Núñez y Pedro Ruz). Un interesante trabajo de setenta páginas que tuvieron que resumir en cinco. Por cierto que hay una española más, sor Carmen Víllora del CES DonBosco de Madrid.

Tras las vísperas nos dio las Buenas Noches la Madre General, sor Yvonne. Luego cenó con los congresistas. Por cierto, somos 230, más o menos.

En la cena tuve la alegre sorpresa de encontrar a Paul, un "niño de la calle" (de los buenos), que encontré hace 24 años en Lomé y que se ha convertido en el Padre Maestro de la AFO (inspectoría de África Oeste).

Al final saludamos los dos a sor Yvonne, porque los tres coincidimos en Lomé en los años 1990-1993, cuando nadie pensaba que nos volveríamos a encontrar en Roma y en estas circunstancias.

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