Era una ocasión importante y los tres grupos que hoy funcionan en este Centro Local de Salesianos Cooperadores han querido manifestar su alegría, su gratitud y su contento con esta ocasión.

Con la asistencia de unas cuarenta personas, con niños pequeños incluidos, se comenzó en la capilla de la Comunidad  la Eucaristía, presidida por Jesús  Guerra, Delegado de  esta zona. 

En la homilía, con los textos del día, Jesús hizo unas acertadas reflexiones, cotejando su contenido con el del Proyecto de Vida Apostólica, animando a todos los asistentes a reanimar sus deseos de vivir como cristianos auténticos y honrados ciudadanos, sin perder la ilusión apostólica de atención a la juventud. 

En el momento del ofertorio todos los presentes renovaron la promesa y se impuso a los protagonistas la insignia de plata de la Asociación. Luego, terminada la eucaristía, siguió un rato de alegre convivencia, durante la que se hizo entrega de un ramo de flores a los que celebraban sus bodas de plata,  se tuvieron palabras de sincera gratitud para  los Salesianos, religiosos y no religiosos, que les habían acompañado y se expresó la alegría y satisfacción de pertenecer a la Familia Salesiana.