La situación:
Finalmente la guerra entre Gaza e Israel ha entrado en un proceso de paz momentáneo. La paz se ha extendido 50 días, del 8 de julio al 26 de agosto. El conflicto del 2014 es ya el tercero en pocos años, lo que da mucho que pensar. El primero fue en los años 2008-2009 (27 diciembre a 18 Enero); el segundo en el 2012 (14-21 de noviembre). Y el actual, que es el tercer conflicto, no solamente ha sido el más largo, sino el más cruento y devastador. En Gaza el número de víctimas contabilizadas es de 2.143 muertos, de los cuales 490 son mujeres y niños. Además, se han contabilizado aproximadamente 11.000 heridos, de los cuales 3.000 son niños.
Las personas desplazadas de sus hogares son más de medio millón, han sido destruidos más de 20.000 construcciones. Se calcula que para reconstruir se necesitarán cerca de 4.500 millones de euros. Y solamente para la ayuda humanitaria básica, es decir, agua, comida, medicinas y electricidad, se necesitan alrededor de 200 millones de euros. También Israel llora a sus caídos, 70 muertos, entre los que se cuentan 6 civiles y un niño. Para contrarrestar e interceptar los misiles lanzados desde la Franja de Gaza (se calculan unos 3.700) y para destruir la intrincada red de túneles, Israel ha disparado unos 3.700 misiles, en la operación militar “Protective Edge” (Borde protector).
¿Servirá tanta sangre derramada para calmar los ánimos y conducir a ambas partes a un verdadero diálogo? Por ahora, gracias a la mediación de Egipto, se ha llegado a una tregua de “cese del fuego ilimitado” (acuerdo que ninguna de las partes debe romper), hasta encontrarse dentro de un mes en la mesa negociaciones. En el momento oportuno ambas partes presentarán sus principales condiciones. Por una parte, Israel pide desmilitarizar la Franja; y por la otra, Gaza pide un puerto, un aeropuerto y mayores posibilidades de movimiento para sus habitantes.
Ya se han dado pequeños pasos, como la reapertura del tránsito en territorio israelita para los enfermos, comerciantes y palestinos con permisos especiales; la reducción de la zona de exclusión para los agricultores de Gaza cerca de la zona fronteriza; y el incremento de la zona de pesca en el Mar Mediterráneo.
Situación de los Salesianos durante el conflicto
Las presencias Salesianas SDB en Tierra Santa son cinco: tres en Israel (Jerusalén, Nazaret y Beit Gemal) y dos en Palestina (Belén y Cremisàn). Las presencias de las Hijas de María Auxiliadora son cuatro: dos en Israel (Jerusalén y Nazaret) y dos en Palestina (Belén y Cremisàn). Todas las obras se encuentran a una distancia significativa de los lugares de conflicto. No se han registrado pérdidas humanas ni daños materiales.
La verdad es que todos, unos más que otros, se vieron afectados por la situación general, dada la vinculación estrecha que existe con la población golpeada por el conflicto. En particular, varios grupos de peregrinos y/o de estudio que ya habían planeado sus viajes, y estaban en contacto con nosotros, los cancelaron, a raíz de la situación de emergencia.
Se ha orado intensamente por la paz de tantas maneras, siendo la única arma a nuestra disposición. En nuestros ambientes, frecuentados únicamente por árabes, ya sean cristianos como musulmanes (los judíos tienen sus propias instituciones educativas). Educamos a los jóvenes para la paz. No es una tarea fácil, sobre todo, en situaciones como estas. El reto es ver con alegría que el Sistema Preventivo y el estilo educativo de Don Bosco, basado en la religión, la razón y el amor, impriman un sello especial en los corazones de los jóvenes.
