Por primera vez en los cinco días del Campobosco 2014, los más de 400 participantes no han tenido que moverse en los autobuses. La jornada ha transcurrido por el Colle Don Bosco, donde se encuentran alojados.
Allí han visitado la casita donde nació y vivió Don Bosco, en el pueblo entonces conocido como I Becchi. El sitio sorprende a los visitantes por ser una humilde morada.
Pero si un momento marcó un antes y un después en la vida de Don Bosco, ese fue el sueño de los 9 años. Por ello, la visita al “Prado del sueño” es una de las más especiales del Campobosco. Allí los jóvenes se han parado a reflexionar y a orar, conscientes de que forman parte de la realidad surgida de aquel sueño.
Una jornada para el encuentro con el Señor
Poco después de las 13:00 horas, las visitas del día habían concluido, pero quedaban por delante momentos para acudir al encuentro con el Señor en una jornada muy especial para los jóvenes del Campobosco 2014.
Los participantes han oído Misa, en español y en portugués, antes de juntarse de nuevo para comer. Por la tarde, se ha procedido a la celebración de la reconciliación, presidida por Fabio Attard, Consejero General de Pastoral Juvenil Salesiana. Un momento especial para gozar de la infinita misericordia de Dios. “No es una experiencia de miedo, sino de comunión”, ha señalado Attard, quien ha recordado que “Don Bosco acogió con serenidad el proyecto de Dios”.
La jornada ha concluido con un momento de oración en la basílica dedicada a Don Bosco. Con la procesión de las luces se ha iluminado este pequeño pueblo del Piamonte que es la capital de los sueños en el mundo salesiano.
